Ya conocemos las presiones por ser y hacer lo que se "debe" ser y hacer... Es decir, lo que otros esperan de nosotros. Lo que los otros proyectan en nosotros.
Pero ser es una experiencia de vida intransferible, y por lo tanto sólo podemos ser lo que somos.
Como dice Osho:
"Sé lo que eres! - Sólo puedes ser lo que eres,
Osho
¿Por qué no
te conoces a ti mismo? Debería ser la cosa más sencilla del mundo y se ha
vuelto lo más difícil.
Conocerse se
ha vuelto casi imposible. ¿Dónde está el error? Tienes la capacidad de
conocerte.
Tú estás
ahí, la capacidad de conocerte también está ahí. Entonces, ¿qué ha sucedido?
¿Por qué la
capacidad de conocer no puede volverse hacia sí misma?
Sólo hay un
error, y a menos que lo arregles, seguirás sin saber quién eres.
Y el error
es que se ha creado dentro de ti una división. Has perdido tu integridad.
La sociedad
te ha convertido en una casa dividida en contra de ti mismo.
La
estrategia es sencilla; una vez que la hayas entendido, puedes eliminarla.
La
estrategia consiste en que la sociedad te ha dado unos ideales de cómo deberías
ser.
Y te los ha
inculcado tanto, que siempre estás interesado en el ideal «cómo debería ser»,
olvidándote de quién eres.
Estás
obsesionado con el ideal futuro y te has olvidado de la realidad presente.
Tus ojos
están mirando al futuro lejano. En consecuencia, no pueden mirar hacia dentro.
Continuamente
estás pensando qué hacer, cómo hacerlo, cómo llegar a ser esto.
Tu lenguaje
se ha convertido en un idioma de deber y convenir, mientras que la realidad
sólo consiste en ser.
La realidad
no conoce deberes o conveniencias.
Sólo el
hombre tiene ideales y deberes. «Debería ser esto y lo otro»; entonces te
divides contra tu propio ser. Deber y ser son enemigos.
No puedes ser algo diferente de lo que eres. Deja que
esto cale profundamente en tu corazón:
sólo puedes ser lo que eres, nada más.
Cuando te ha
penetrado esta verdad, «sólo puedo ser
yo mismo», desaparecen todos los ideales. Automáticamente se descartan. Y
cuando no hay ningún ideal, te encuentras con la realidad.
Entonces tus
ojos están aquí y ahora, estás presente en lo que eres. Desaparece la división,
la separación. Eres uno."
Así como la rosa, huele a rosas y tiene espinas, porque es una rosa, también nosotros estamos invitados a ser lo que somos, porque sólo así daremos lo mejor de nosotros.
Graciela M. Losada
Graciela M. Losada